Tu web puede ser el corazón de tu negocio, y puedes depender 100% de ella para tus contactos, ingresos, gestión, etc. Pero:
¿Y si me hackean?
¿Y si se cae el servidor?
¿Y si pasa algo en el país donde está mi servidor? ¿Un huracán, un tsunami, algo?
Para todo ello, lo mejor es anticiparse, mantener la calma, tener un plan y ejecutarlo. ¡Veamos cómo!